Last week I took a breath from study to go to the cinema with Jordi. We went to see ( the modern because of classic) "The artist". The french director Michel Hazanavicius place the action in the Hollywood of the 30s, on the passage of silent movies to voice. The story is centrated in the careers of two actors: the first one, George Valentin, a very successful silent movie star whose career ends with the arrival of the talking pictures; and the second one, Peppy Miller, a young extra who turns in a major star of the voice cinema; who lived a sweet love story.
The transition between the two types of cinema is the main subject of the whole movie, and how it turns a nightmare for George and a dream to Peppy. Is the transition between two generations and two ways of understanding and seeing the world.
The platonic love between the two characters guides the story: from the moment they met, to the moment they finally are able to stay together, as if they were the two cinema traditions they represent. Valentin's pride leads his downfall as he resists to the changes.
The music and the no-voice gives an special atmosphere to the story and demonstrate how important is the body language and our capacity of understanding: you can follow the film really well (but, being realistic, I wasn't able to take out of my mind the idea of "something is missing": guess that the habit is too strong).
The photography and the atrezzo, as the aesthetics, are amazing. The sensibility and the sympathy of the images (and the absolutely lovely dog) help you empathize with the film, telling an atemporal story that fits very realistically the time where the story it's placed.
The artist is a reflection about the importance of being able to adapt to new situations, to progress and the transcendence of keeping open-minded. An actitude that seems a need in our crisis-times.
La semana pasada hice un break en mi periodo de estudio para ir al cine con Jordi. Fuimos a ver (la moderna por clásica) "The artist". El director francés Michel Hazanavicius situa la acción en el Hollywood de los años 30, en el paso del cine mudo a la voz. La historia se concentra en las carreras de dos actores: el primero, George Valentin, una estrella del cine mudo cuya carrera muy exitosa termina con la llegada de los cuadros que hablaban, y el segundo, Peppy Miller, un extra de joven que se convierte en un gran estrella del cine de voz; que viven una historia de amor.
La transición entre los dos tipos de cine es el tema principal de la película entera, y cómo se convierte en una pesadilla para George y en un sueño para Peppy: Es la transición entre dos generaciones y dos formas de entender y ver el mundo.
El amor platónico entre los dos personajes guía la historia: desde el momento en que se conocieron, hasta el momento en que finalmente son capaces de estar juntos, como si fueran las dos tradiciones cinematográficas que representan. El orgullo de Valentín dirige su caída, mientras se resiste a los cambios.
La transición entre los dos tipos de cine es el tema principal de la película entera, y cómo se convierte en una pesadilla para George y en un sueño para Peppy: Es la transición entre dos generaciones y dos formas de entender y ver el mundo.
El amor platónico entre los dos personajes guía la historia: desde el momento en que se conocieron, hasta el momento en que finalmente son capaces de estar juntos, como si fueran las dos tradiciones cinematográficas que representan. El orgullo de Valentín dirige su caída, mientras se resiste a los cambios.
La música y la no-voz dan una atmósfera especial a la historia y demuestran lo importante que es el lenguaje corporal y nuestra capacidad de entendimiento, pues la película se sigue realmente bien (pero, siendo realistas, yo no era capaz de sacar de mi mente la idea de "algo falta ": Supongo que la costumbre es demasiado fuerte).
La fotografía y atrezzo, así como la estética, son increíbles. La sensibilidad y la simpatía de las imágenes (y el perro absolutamente precioso) ayudan a empatizar con la película, contando una historia atemporal que se adapta con gran realismo al momento en que la historia está colocado.
La fotografía y atrezzo, así como la estética, son increíbles. La sensibilidad y la simpatía de las imágenes (y el perro absolutamente precioso) ayudan a empatizar con la película, contando una historia atemporal que se adapta con gran realismo al momento en que la historia está colocado.
"The artist" es una reflexión sobre la importancia de ser capaz de adaptarse a nuevas situaciones, de progresar y la trascendencia de mantener una mente abierta. Una actitud que parece una necesidad en estos tiempos de crisis.
XX, Núria
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